_

_

martes, 28 de junio de 2011

fighter

Los hay que derraman todo lo que tienen a cada paso que dan en este mundo. Estas personas no guardan fuerzas para la vuelta, no agachan la cabeza, no hincan la rodilla para nada que no sea levantarse de nuevo.

Tienen espíritu de boxeador, una resilencia especial que los hace de otra pasta, encajan los golpes con la facilidad de quien va a por más sin titubear. Saben que quejarse de las circunstancias es de débiles porque sólo ellos tienen el poder de cambiar su realidad. Se mueren por la vida y se abren paso a través de ella de la única forma que saben hacerlo, luchando.

Sólo el que pelea por algo sabe cuál es su verdadero valor. Yo soy un luchador y no me gusta que me regalen nada, por eso nunca pido deseos, voy de cabeza y corazón a por ellos.

viernes, 24 de junio de 2011

todo el mundo se cree juez

Es una noche importante para ti, has aprobado con nota una prueba jodida, compartir espacio vital durante horas sin pestañear. Te sorprendes a ti mismo, has bebido mucho pero aún así continúas entero y templado. Estás curado y lo has conseguido por ti mismo, con la conciencia más tranquila que un mar en calma, sin decir una sola mala palabra de nadie, aguantando el temporal de la única forma que sabes, apretando los dientes. Has digerido sus decisiones sin levantar la voz por muy dolorosas que hayan sido, porque son precisamente suyas y de nadie más, porque tú no eres nadie para juzgarlas. Y de repente te llega la bomba informativa y es más de lo que puedes asimilar, te han pintado como un criminal muchas veces, más de las que lo has sido, y todo por tu silencio, por empeñarte en ser un testigo mudo.  Pero que se atrevan a juzgarte quienes más tienen que callar es algo que te alucina. Que tú haces lo que quieres sin molestar a nadie porque tienes derecho a hacerlo, y que no eres ni el más santo ni el más maduro ni el más buenazo ni el más comprensivo pero, ¡coño! es que no dejan de tocarte los cojones. Me parece a mí que no tienen ni idea de que si tú hablases, más de uno y más de una, se quedaba sin habla.

jueves, 23 de junio de 2011

algo verdadero y algo que no

Es cuestión de impulsos, de descargas, de escalofríos. 
Existe gente que te empuja a hacer cosas a las que normalmente no estarías dispuesto, que consigue que nazcan en ti iniciativas y sensaciones que nunca creíste poseer. 
Hay otras que no lo despiertan; y eso es algo que sencillamente existe o no lo hace. 
No puede crearse química entre dos personas. No señor. 
Y esto es algo que se reconoce desde el primer momento, por eso no son necesarios grandes alardes para seducirse los huesos, para conectar. 
Quizás sea la explicación de que haya cosas que no se pueden borrar y otras que sencillamente no recuerdas.
Quizás sea la diferencia entre un sentimiento verdadero y uno que no lo es.

viernes, 17 de junio de 2011

tobogán

La vida funciona como un tobogán de un parque infantil. El que hace cumbre está irremediablemente condenado a bajar después. Pese a ser conscientes de ello, todos nos apiñamos en la cola, protestamos sin cesar y nos pegamos tortas por ser los primeros de la fila. Algunos, los más espabilados, hasta se pretenden colar. Todo ello por saborear esos pocos segundos en la cima, los que transcurren desde el primer escalón hasta la boca del tubo. Ahí estás tú, por derecho, por turno, por lo que sea. Este es tu momento de gloria pero, en lo que dura un parpadeo, se ha esfumado, sin más, ¿cómo y por qué?.

Sólo en el instante en que tus pies tocan ese suelo polvoriento por primera vez eliges qué tipo de persona quieres ser. Porque después de deslizarte desde tan arriba, aún con el regusto en los labios y el hormigueo en la barriga echas, indefectiblemente, la vista atrás. Y cuando echas la vista atrás, o eres consciente de que estás derrotado y no quieres volver a la cola o caes en la cuenta de que la pelea  por un trocito de felicidad no ha hecho más que comenzar.

martes, 14 de junio de 2011

a mi manera

Es una sensación curiosa la de comenzar este diario de a bordo, más aún cuando no persigue ninguna ambición particular. Puede que sea algo tan sencillo como un área de descanso donde desentumecer el pensamiento y esclarecer ideas que de otra forma acabarían garabateadas en folios condenados a coger polvo. Si bien es cierto que aún no tengo una idea preclara del ambiente que quiero darle a este lugar, sí sé que estará hecho a mi manera. Probablemente no será la mejor ni la más original pero sí la más auténtica y personal. El leitmotiv no será otro que dejar caer esporádicos pedazos de mi para quien tenga a bien recogerlos y otorgarles algún valor.
En mi caso me cuesta escribir por placer, lo mío es un tema más vital que estético ya que soy una persona a la que le cuesta expresar con propiedad lo que siente si no es delante de un papel en blanco. A lo mejor he mentido y sí existe una ambición detrás de este proyecto, la ambición de que estos textos se conviertan en mi contribución a los demás; compartir estos sentimientos y reflexiones para que en el mejor de los casos se convierta en un empujoncito para todo aquel que alguna vez sintió algo parecido y no supo cristalizarlo en palabras.